J.Martínez Amo

martes, 4 de octubre de 2011

¿El futuro de la TV pasa por el 3D?


Llevo algunos meses trabajando en el terreno del 3D, viendo los medios con los que se trabaja, los problemas que implica y las barreras de entrada de la tecnología. Me gustaría hablar un poco sobre ello.

Por una parte el cine en 3D ha entrado con fuerza, tiene sus detractores pero en general hay que reconocerle cierto encanto más allá de la pura novedad. Sin embargo parece que no acaba de pisar fuerte en el resto de dispositivos (excepto el acercamiento de Nintendo con la 3DS).
Una de las causas es la complejidad técnica que implica el salto, que además es distinta en cada máquina. Otra seguramente sea que la generación de contenidos en 3D aumenta mucho los costos. Un rodaje en tres dimensiones puede suponer casi duplicar los gastos técnicos, incrementando fácilmente más de un 30% el precio total de la producción. Esto sería suponiendo que no hubiera que comprar o desarrollar tecnología nueva y formar profesionales, cosa que si está ocurriendo en realidad. Este costo es difícil de asumir por producciones televisivas y cineastas minoritarios por una razón, no hay forma humana de amortizarlo porque no hay nadie que lo emita. Aunque costara lo mismo la producción, no saldría rentable.

Parece que nos encontramos en un punto muerto. La gente no compra tecnología porque no hay contenidos, y no se hacen apenas contenidos porque no hay tecnología que cubra la demanda. Entonces llega la gran pregunta: ¿es realmente necesario?¿el valor que aporta el 3D justifica la inversión?
Seguramente la respuesta, por ahora, sea negativa. En mi opinión es un buen complemento pero que a día de hoy exige demasiado a una industria con muchos frentes abiertos (estamos en pleno cambio a la televisión online). Lo más probable es que veamos 3D dentro de unos años en nuestras casas, pero es imperativo un cambio generacional completo en las pantallas de TV hasta que la mayoría de ellas permita emitir estos contenidos. Llegado este punto la inversión necesaria sería casi la misma pero las posibilidades de amortización muchísimo mayores.

Para finalizar, un par de apuntes:
-Quizá la irrupción de la TV con internet, algo que promete ser un auténtico tsunami, sea la solución a todos los problemas del 3D. Pantallas nuevas en muchas casas y la posibilidad de emitir en 2D y 3D el mismo contenido para que el usuario elija.
-La industria de los videojuegos, si estuviera hoy como en sus mejores tiempos, seguramente podría impulsar esta tecnología. No olvidemos que uno de los valores en los que más se ha invertido en esta industria es en la inmersión, de ahí la eterna guerra por mejorar los gráficos y el consiguiente tirón del hardware gráfico.

¿Que opinas tú?

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